Nace en 1945, muy cerca de París. Escritor controvertido, contestatario, utópico, en su trabajo Duvert hace eco de la ola libertaria de los años setenta. Su tema son los niños y los adolescentes: sus palabras, su autonomía, sus placeres.
Su primera novela, Récidive (1967), es un relato punzante sobre el deseo adolescente. Gracias a ese texto, Jérôme Lindon lo cobija en Minuit, la prestigiosa editorial que publicó a Beckett y que fue semillero de los autores de la llamada Nueva Novela. En 1973, su libro Paysage de fantaisie obtiene el premio Médicis con el apoyo incondicional de Roland Barthes.
Duvert muere en 2008, en condiciones deplorables. Su obra ha sido rescatada del olvido gracias al escritor y pintor Gilles Sebhan, quien le ha dedicado dos ensayos: L’enfant silencieux y Retour à Duvert.